LA MODERNIZACIÓN DE LA EDUCACIÓN EN COLOMBIA:
RETOS Y POSIBILIDADES
Fecha
de recepción: 21/06/2017 Fecha de revisión: 30/06/2017 Fecha de
aceptación: 26/08/2017 RESUMEN El hombre tiene la necesidad histórica
de aprender y de desarrollarse, día a día se esfuerza por lograr un mundo mejor
en el cual pueda existir, en un ambiente de convivencia, de inclusión y respeto
por los valores y principios que profesa. Para lograr tal fin el hombre
requiere de una formación integral que le permita convertirse en un ser social,
capaz de convivir con los demás, esa capacidad de aprender se logra a través de
la educación, la cual se convierte en el pilar fundamental del desarrollo
social y económico de un país. Colombia es un país de contrastes en
materia de educación, por un lado se ha logrado avances significativos en
materia de cobertura, accesibilidad e inclusión, sin embargo existen barreras
en materia de política pública y de los responsables de ejecutar dicha
política, los cuales obedecen más a intereses particulares, desconociendo el
goce efectivo de los derechos de los ciudadanos por una educación de calidad. Los continuos cambios en materia de
modernización de la Educación, por los diferentes gobiernos de turno, han
generado incertidumbre y experiencias negativas que disminuyen las
posibilidades de alcanzar el anhelado sueño de una educación incluyente y de
calidad. Sin embargo aún existe la posibilidad de
lograr articular esfuerzos por los diferentes grupos de interés con el fin de
modernizar de manera efectiva la educación y lograr formar ciudadanos globales,
con un enfoque multicultural, capaces de alcanzar un desarrollo sostenible del
país, a través de la generación de nuevo conocimiento, investigación y
desarrollo con creatividad, en búsqueda de una sociedad más justa y equitativa. Palabras Clave: Educación, modernización, desarrollo,
posibilidades. THE MODERNIZATION OF EDUCATION IN
COLOMBIA: CHALLENGES AND POSSIBILITIES ABSTRACT Man has the historical need
to learn and to develop, every day he strives to achieve a better world in
which he can exist, in an atmosphere of coexistence, inclusion and respect for
the values and principles he professes. To achieve this end, man requires an
integral formation that allows him to become a social being, able to coexist
with others, that capacity to learn is achieved through education, which
becomes the fundamental pillar of social development And economic development
of a country. Colombia is a country of
contrasts in education, on the one hand significant progress has been achieved
in terms of coverage, accessibility and inclusion, however there are barriers
in public policy and those responsible for implementing such policy, which obey
more To private interests, ignoring the effective enjoyment of the rights of citizens
for a quality education. The continuous changes in the
modernization of education, by the different governments in turn, have
generated uncertainty and negative experiences that diminish the chances of
achieving the longed for an inclusive education and quality. However, there is still the
possibility of articulating efforts by different interest groups in order to
effectively modernize education and to create global citizens with a
multicultural approach capable of achieving a sustainable development of the
country through Generation of new knowledge, research and development with
creativity, in search of a more just and equitable society Key Words: Education,
modernization, development, possibilities. INTRODUCCIÓN La educación en Colombia y en general en
el mundo, debe ser dinámica y cambiante, respondiendo así, a las necesidades y
exigencias del entorno global, cada día más exigente, con ciudadanos globales,
digitales altamente capacitados y con una gran expectativa sobre el impacto en
la sociedad. En este sentido los países definen la política pública que
orientará su devenir frente al tema, convirtiéndose de esta manera en una
prioridad. En el caso Colombiano y según lo expresado por el Ministerio de
Educación Nacional “Colombia ha puesto a la educación como la principal
prioridad para mejorar la prosperidad económica y social del país y ha
prometido más recursos para este sector que para cualquier otra área de
política” (Ministerio de Educación Nacional, 2004). Esta constante inquietud por parte del
estado, la cual se expresa en leyes y normas, no ha logrado el impacto esperado
en la calidad de la educación, si bien es cierto no se puede desconocer avances
relevantes en materia de cobertura, frente al siglo pasado, aún resta mucho por
hacer. Al respecto (Ardila 2011) considera que la problemática de calidad en la
educación superior en Colombia “Emerge de la incapacidad por parte de la
comunidad educativa e instancias gubernamentales para afrontar los retos que le
imponen la evolución en los fenómenos sociales, económicos, culturales,
científicos y políticos y su incidencia en el desarrollo educativo
internacional, nacional, local y regional” (Ardila,
2011, págs. 44 - 55). Efectivamente el estado ha demostrado su
incapacidad de Responder de manera oportuna a las necesidades y expectativas de
la denominada comunidad académica, entendiéndose esta, como los grupos de
interés que abordan la problemática, orientada a los procesos de democratización
de la educación, pertinencia de la oferta educativa, el grado de competitividad
de los egresados frente a las exigencias del mercado laboral global, la
multiculturalidad, accesibilidad, pertinencia entre otros. Las actuales políticas públicas del
estado colombiano en materia de educación se encaminan a educar a las personas
consideradas menos favorecidas, se trata de generar expectativas en este
segmento de población, acerca de las posibilidades de lograr una verdadera
equidad y democracia en materia de educación, sin embargo y de acuerdo a los
resultados observados, lo que evidencia el modelo de educación en Colombia, es
que se forma a los jóvenes para que se conviertan en funcionarios o empleados
eficientes para el mercado laboral que los apetece, de esta manera se cumple
“la función social de la educación”, sin embargo y frente a la realidad y
exigencias del entorno global, las necesidades son diferentes. La generación de
nuevo conocimiento exige mucho más que empleados felices, requiere la formación
de personas con criterio propio, con una visión global, capaces de dar
respuesta a las necesidades de la sociedad, con capacidad de reflexionar y
visionar la sociedad en la que desean vivir. De otra parte y con respecto a la
educación en Colombia y su futuro cercano Andreas Schleicher, Director de
Educación y Competencias de la OCDE considera que “A medida que Colombia se
incorpore a la economía global, su éxito educativo se medirá por un progreso de
los estándares nacionales que permita que el desempeño de los niños colombianos
iguale al de sus pares de todo el mundo” (OCDE, 2016), históricamente, existe
una brecha educativa compleja de reducir, razón por la cual, mejorar en el
corto plazo los resultados de los estándares nacionales, se convierte en una
tarea compleja e incierta, más aún cuando y según la OCDE, los resultados de
las pruebas PISA, en el país demuestran que los estudiantes de 15 años, se
encuentran tres años por detrás de sus pares de los países que integran la
OCDE. Así las cosas en el corto plazo lograr resultados positivos se convierte
en un espejismo, más aún cuando no existe claridad en las políticas públicas en
materia de educación. De igual manera en el país existe mayor
interés en aspectos variados y muy diferentes a la Educación, la inversión en
este rublo no se compara con la de otros países de la región que entienden que
en la formación del capital humano se encuentra la ruta hacia el desarrollo
social, en este sentido y considerando el aporte de la OCDE, “Sería conveniente
asignar más recursos a la atención y educación preescolar y a la educación
básica para mejorar los resultados educativos y garantizar que todos los
estudiantes tengan oportunidades de éxito equitativas. El gasto público por
cada estudiante en la escuela es la mitad del dedicado a cada universitario y
equivale a un cuarto de lo invertido por el país promedio de la OCDE. Habría
que mantener o incrementar los niveles de gasto actuales, además de movilizar
recursos adicionales” (OCDE, 2016). Evidentemente, es mucho más productivo
invertir en las etapas tempranas de la educación, ya que desde este momento los
niños, tendrán más oportunidades de mantenerse en el sistema educativo y
disminuir sustancialmente los niveles de deserción escolar. Si bien es cierto se apropian recursos
para la educación, gran parte de los mismos son desviados por los políticos de
turno, quienes a través de artimañas, desfalcan y sistemáticamente limitan las
posibilidad de los niños en este país. Basta con recordar los escándalos en la
contratación de los programas de alimentación escolar del ICBF Instituto
Colombiano de Bienestar Familiar, el carrusel de las pensiones de la educación
en el departamento de Córdoba, al respecto en el periódico el Heraldo se
publicó que: “Estas personas estarían relacionadas por el sonado caso del
“carrusel” de la educación que habría desfalcado el fondo de prestaciones
sociales del magisterio en una suma superior a los 400 mil millones de pesos” (El Heraldo, 2015). Estos son algunos de los casos más recordados y de muchos
más que seguramente permanecen ocultos por las mismas autoridades de control
del estado. Un aspecto fundamental en los procesos
de diseño e implementación de la política pública en materia de educación, es
la participación ciudadana en los procesos de toma de decisiones y lógicamente
su implementación y seguimiento. Esta participación se convierte en un
horizonte a seguir, ya que las necesidades y expectativas, se encuentran
concentradas en las personas que en últimas son las beneficiarias de los
servicios educativos que ofrece el país. Amén de que no solo se refiere a un
tema de derechos fundamentales que el estado debe garantizar, sino además de la
transparencia y del sello de garantía, que representa la participación
ciudadana en el seguimiento de la ejecución de la política pública. En definitiva los estados desarrollados
con una fuerte sociedad civil, requieren de bases fuertes y sólidas, una de
ellas y tal vez las más importante es la educación, que a través del
aprendizaje, las tecnologías de la información, la generación de nuevo
conocimiento a través de la investigación, la innovación y la creatividad
generan las condiciones perfectas para un desarrollo sostenible y lo más
importante una sociedad con una cultura propia producto de su desarrollo y el
fortalecimiento de su identidad. Por lo tanto la sociedad civil a través de la
participación ciudadana, juega un papel fundamental, no pueden ignorar la
responsabilidad social que les compete y que de forma directa garantiza el
deber ser de los asuntos en materia de educación. No se puede seguir ignorando
los continuos atentados en contra de la educación de calidad, todos ellos en
búsqueda de beneficios propios y mezquinos que debilitan el accionar de la
educación en una sociedad ávida de educación de calidad para su población. Existe una dicotomía entre lo que el
estado promulga a través de los diferentes planes y proyectos de educación en
Colombia, cada gobierno de turno lanza una propuesta mágica que según sus
autores permitirá al país lograr, o la paz, o el desarrollo en fin el argumento
de turno. Son ya décadas de falsas promesas incumplidas y de desaciertos que
disminuyen la confianzas del pueblo que ve como al pasar el tiempo todo queda
igual, la inequidad, la pobreza, la falta de inversión, la discriminación en
fin las diferentes variables que impiden una educación de calidad y sobre todo
con acceso y posibilidades para todos. Otro aspecto importante a destacar es la
contradicción que existe entre la educación tradicional con sus aportes en
materia de artes y humanismos en la cual el ser prima y la escuela de la
globalización que exige un ciudadano competente para hacer frente a los retos
que impone la modernidad, capaz de hacer frente a las problemáticas actuales y
con orientación al saber hacer como un aporte al desarrollo social, en general
convertir especialistas en áreas específicas que son el referente en esta
temática y que les garantiza de alguna manera un espacio en el contexto
empresarial actual, en el cual se requiere de trabajadores que le aporten valor
a la organización, independientemente de su desarrollo humano. Al respecto se
considera la siguiente conceptualización que profundiza en la idea: La escuela de la
globalización va a fundar su dinámica en la construcción de competencias,
caracterizadas como un saber hacer en contexto y que son trabajadas desde un
conocimiento que por su componente tecnológico siempre pide un tipo de saber
hacer derivado del conocimiento que es recibido. Es así como las competencias
terminan siendo portadas por los individuos, ya que ellas le van a garantizar
la empleabilidad. (Mejía, 2013). Por tal motivo se hace necesario
repensar las verdaderas necesidades de la sociedad en un mundo globalizado,
replantear hacia donde se quiere orientar la sociedad y que educación requieren
los ciudadanos para convertir en escenarios deseables la sociedad ideal, donde
no todos se orienten al beneficio de unos pocos en un mundo capitalista, en
donde priman los intereses particulares y en el cual no existe espacio para la
inclusión. No obstante, muy a pesar de todos los
aspectos que ponen en riesgo el futuro de la educación en Colombia, es menester
reconocer que la educación, como derecho fundamental, ha logrado avances
significativos, sin embargo aspectos como la calidad, la cobertura y la
accesibilidad son temas en los que se debe hacer una gran labor. El modelo
ideal de educación que se quiere irradiar en el mundo, es complejo de
implementar en los contextos latinoamericanos, ya que los ideales de sociedad
son diferentes, las dificultades, las aspiraciones y en fin los propósitos son
cambiantes, razón por la cual implementar modelos diseñados en otras sociedades
es una tarea compleja de abordar. En resumen la modernización de la
educación requiere algo más que políticas públicas, requiere del esfuerzo de
los grupos de interés que interactúan en la sociedad, desde la familia en la que
el niño se forma, hasta el sector empresarial en el cual interactuará
laboralmente hablando, agregando actores, como los profesores, el estado, entre
otros que aportan al logro de una educación globalizada y contextualizada que
busca la formación de ciudadanos globales capaces de actuar en los diferente
contextos, pero con un enfoque regional de acuerdo a las expectativas de dicho
contexto. BIBLIOGRAFÍA ARDILA, M. (2011). Calidad de la
educación superior en Colombia, ¿problema de compromiso colectivo? Educación y
Desarrollo Social, 44 - 55. EL HERALDO. (2 de Octubre de 2015).
Capturan a 15 personas en Córdoba por 'carrusel' de la educación.
Procedimientos judiciales se desarrollaron en Cereté, Lorica y Montelíbano. MEJÍA, M. R. (15 de Febrero de 2013).
Debate Buena Educación. Obtenido de
http://www.debatebuenaeducacion.org/index.php/articulos/39-entrevista-la-calidad-de-la-educacion-una-disputa-polisemica-por-sus-sentidos MINISTERIO DE EDUCACIÓN NACIONAL. (Enero
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un país que educa y que se educa.:
http://www.mineducacion.gov.co/1621/article-87230.html OCDE. (2016). Colombia debería mejorar
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Febrero de 2017, de
http://www.oecd.org/centrodemexico/medios/colombia-deberia-mejorar-la-equidad-y-la-calidad-de-la-educacion-ocde.htm